Las fresas contienen gran cantidad de vitamina C además de que tiene propiedades diuréticas, laxantes y desintoxicantes, por lo que es una excelente fruta capaz de depurar el organismo.
Realizar la dieta de la fresa trae consigo varios beneficios como mejorar la calidad de la piel y los dientes, limpiar el organismo, fortalecer el sistema inmunológico y reducir medidas.
La dieta de la fresa consta de cuatro días (no se debe exceder de este tiempo) puede ser acompañada por zumos de fruta (pomelo, naranja, zanahoria), te verde y abundante agua.
Día 1:
Desayuno
– Ensalada de frutas (10 fresas, una cuchara de miel y una manzana)
– Un vaso con zumo de naranja
Comida
– Caldo de verdura con 50g de pollo sin piel
– Comer un vaso con fresas con un poco de nuez
Cena
– Ensalada insolita con 100 g de fresa, medio vaso de yogur descremado, 300 g de patatas hervidas, 50 g de requeson, una zanahoria rallada y un poco de sal.
Día 2:
Desayuno
– 2 rebanadas de pan con salvado y 50 g de requeson.
Comida
– Comer 3 crepes añadiendoles rebanadas de fresa
Cena
– Comer 100 g de col hervida
– Un vaso con fresas y un yogurt descremado
Día 3
Desayuno
– Dos rebanadas de pan con salvado o integral
– Un vaso con fresas
– Un vaso de leche de soya
Comida
– Un filete de pescado a la plancha con una rebanada de pan integral
– Ensalada con melón, fresas y plátano
Cena
– Comer una ensalada de zanahoria, patatas y col hervidas
Día 4
Desayuno
– Un vaso con fresa y medio vaso de yogurt descremado
Comida
– 100 g de filete de bacalao
– Ensalada de lechuga y fresas
Cena
– Un vaso con fresas, 50 g de requesón, una zanahoria rayada y un vaso de yogurt descremado.
Las colaciones pueden ser 5 fresas o un vaso de zumo de frutas.